Recreo tus labios al tacto de mis muslos,
recreo tus manos acariciándome la espalda,
recuerdo tu lengua cortando mariposas en mi ombligo,
no me acuerdo de tu rostro, no eras tú, no estabas conmigo.
Siento tu aliento, y en mi memoria tengo tu olor
como una huella que sigue conmigo,
me cuidan, me resguardan, pero tu ya no estas conmigo.
Mi ausente, alusinante, mi amante lejano,
mi sombra, mi espejo, por qué hoy,
por qué no estas conmigo.